Bestia mansa, mansa lokura

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mendoza, mendoza, Argentina

10.09.2008

Erl King

Bueno gente XP... este es un escrito de hace mucho ya XP...

saludo

Erl King

Hace muchos años atrás, en Alemania vivía con su padre, cerca de un bosque, un niño llamado Rudolf que era muy travieso, rebelde y curioso. Ellos salían a caminar por el bosque todas las tardes y regresaban a la noche.
Un día cuando salieron a caminar Rudolf se alejo de su padre y cuando lo perdió de vista, empezó a oír un verso que decía:

-¡Tu querido niño, ven, ven conmigo!
¡A muchos bellos juego jugare contigo!

Rudolf al escuchar esto se asusto y salió corriendo y alcanzo a su padre.
Al día siguiente se volvió a alejar y escucho el mismo verso y se detuvo ligeramente, pero al darse cuenta se asusto y salió corriendo. No sabía por que se había detenido. Al otro día sucedió lo mismo y se detuvo mas tiempo, la tercera vez, escuchó que se movían los arbustos y fue a ver que era. Entonces observó que era una puerta trampa, la abrió y frente a él apareció una sala de juegos enorme y una gran escalera que a al final se encontraba un hombrecito sonriéndole y saludándolo.
Rudolf bajo los escalones y al llegar, el paraíso se transformó en un infierno y el pequeño hombrecito se transformó en un pútrido cadáver de pie, lleno de gusanos moviéndose de un lugar a otro y largando una masa gelatinosa y repulsiva por los ojos.
Rudolf al verlo se asustó y salió corriendo por las escaleras, que al instante se transformaron en una resbaladilla inclinada verticalmente y callo en una habitación cerrada y llena de gusanos de donde no podía salir.
Al instante las paredes empezaron a cerrarse y brotaron punzones que cuando estaban apunto de reventarle la cabeza se transformaron en víboras de metal y se escurrían por sus orejas y le comían el cerebro, mientras los gusanos se metían por su nariz y los ojos reventados.
El padre había intentado encontrarlo pero sus esfuerzos fueron inútiles, porque sabía que había terminado en las garras de Erl King.


Moraleja: niños no se alejen de sus padres en un bosque alemán cuando escuche este verso porque pueden terminar descerebrados y con los ojos llenos de gusanos.